Doce distritos de Madrid y cuatro municipios celebran este domingo consultas populares sobre la monarquía

Las consultas populares sobre la monarquía siguen en Madrid. Este próximo domingo la plataforma Consulta Popular Monarquía o República va a sacar unas cien urnas a la calles de 12 distritos madrileños, cuatro municipios de la región y en Miranda de Ebro (Castilla y León) para que sus vecinos opinen sobre qué modelo de Estado quieren en un referéndum simbólico.

No lo podrán hacer como estaba previsto en la localidad, también madrileña, de Alcobendas porque el ayuntamiento, gobernado por el PP, no ha autorizado el acto alegando que “no se ajusta a derecho”, según denuncia la plataforma.

Estas consultas se celebrarán apenas tres días después de que la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) diera el pistoletazo de salida el pasado jueves a unos referendos informales en 26 universidades de toda España que tendrán lugar en diciembre.

La participación en la consulta universitaria del jueves fue de 7.303 personas, con 6.111 papeletas a favor de la república. Como referencia, aunque no sea directamente comparable porque estos referéndums no son oficiales, no constan de censo y no se pide identificación para votar, en las elecciones a rector del mismo campus hace un año votaron menos de 4.000 personas.

Diciembre se ha convertido en el mes de las consultas populares sobre la monarquía, aunque el movimiento viene cogiendo fuerza desde antes. En los distritos, también madrileños, de Vicálvaro y Vallecas ya se han realizado consultas similares, y este viernes 30 de noviembre se ha celebrado también en Talavera de la Reina (Toledo).

“Queremos decidirlo todo”, el nuevo lema

“Este movimiento se inscribe en el derecho a decidir que pedimos. Queremos decidirlo todo”, explica Pedro Casas, miembro de la plataforma que está organizando las consultas, parafraseando a los estudiantes universitarios, que eligieron precisamente esa frase como lema.

“En realidad querríamos que fuera el Gobierno el que lo haga, de forma oficial, pero tampoco queremos esperar a que se decida, así que vamos sacando las urnas nosotros”, comenta.

Porque desde esta plataforma, como sucede con las universitarias, creen que la democracia representativa está distorsionada y además existen mecanismos y tecnología para avanzar hacia una democracia más participativa.

“Si se hiciera una encuesta en el Congreso sobre quién quiere hacer un referéndum sobre la monarquía, como un 80% de diputados estaría en contra. Pero esa misma encuesta en la calle daría un 60% o 70% a favor. Hay una distorsión ahí y, aunque la representación está bien, en algunos aspectos está demostrando que hay un divorcio con la ciudadanía a la que representa”, considera Casas.

La iniciativa surgió a partir de un grupo de activistas que ya habían coincidido en otros movimientos sociales y participado en asambleas de trabajadores de barrios y pueblos. A alguien se le ocurrió la idea y al resto le pareció acertada. “Queríamos también salir un poco de la rutina del movimiento republicano, sobre todo madrileño, que a veces se queda un poco en manifestaciones en la calle”, relata Casas.

Militantes de base, no afiliados políticos

“Una de nuestras ideas básicas era que no fueran militantes de partidos los que pusieran las mesas, sino personas del tejido social, activistas de barrio, etc. Y así lo hemos hecho”. La organización calcula que unas 500 personas saldrán voluntarias el domingo a colaborar en alguna de las cien mesas electorales que se montarán por la capital [aquí un listado de las urnas, la votación será de 10 a 15 horas].

Este madrileño está entre los que votaron en el referéndum de 1978 por el que se aprobó la Constitución y, con ella, la monarquía, pero cree que hay motivos de sobra para que se opine. Y demanda social.

“Tenemos bastante buenas expectativas, aunque no sabemos cuantificarlas”, desliza. “Hace unos años se hizo una consulta muy exitosa cuando se habló de la privatización del Canal de Isabel II”, recuerda, “pero sobre este tema no se ha hecho nada nunca. El ambiente es bastante bueno, y cuando salimos a repartir propaganda por la calle la acogida es muy positiva”.

Como los estudiantes universitarios, la plataforma defiende que esto es solo el principio. “Hemos iniciado un proceso al que vemos que se está incorporando gente. Universidades, ciudades de otras comunidades autónomas que se están poniendo en contacto... No está decidido aún del todo, pero es probable que más adelante organicemos otra jornada en otros territorios”, cuentan.

Y están encantados con el relevo generacional que se atisba. “Es muy ilusionante el movimiento de las universidades. El futuro de este país lo van a decidir los jóvenes”, cierra.