Vecinos de Campamento denuncian a Almeida ante la Fiscalía por el “triángulo de la contaminación” de Madrid

Diego Casado

Madrid —

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Los vecinos olvidados en el soterramiento del Paseo de Extremadura han elevado el tono de sus protestas. Después de manifestarse para reclamar que la obra más cara del Ayuntamiento de Madrid para el segundo mandato de Almeida llegue hasta el barrio de Campamento, su asociación de vecinos acaba de denunciar al consistorio ante la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente por la contaminación que sufren y la inacción del actual equipo de Gobierno ante su problema.

La Asociación Vecinal Campamento denuncia que los habitantes de este barrio de Latina soportan niveles de polución por encima de los legalmente establecidos debido a los 200.000 vehículos que pasan a diario por sus calles, y que, pese a ello, el Ayuntamiento les ha dejado fuera del soterramiento, un proyecto que según el área de Movilidad y Medio Ambiente reducirá en un 90% la contaminación que soportan otros barrios.

Según las mediciones incluidas en la denuncia, a la que ha tenido acceso Somos Madrid, los residentes de Campamento sufren niveles de NO2 hasta 30 puntos más de lo permitido e índices de ruido 15 dB y 20 dB por encima de lo que marca la ordenanza municipal.

Por ello, la entidad ciudadana ha solicitado a la Fiscalía en la mañana de este miércoles que inicie actuaciones y dicte medidas cautelares ante una presunta comisión de delitos causados, “tanto por acción como por inacción, por ”cargos directivos, funcionarios y miembros del Ayuntamiento que han participado en los distintos expedientes respecto a escritos y denuncias previas planteadas en los últimos años.

Alegan que, “aunque es cierto que el Consistorio cumple desde hace dos años el valor límite anual de NO2 que marca Europa, también lo es que esos datos no afectan a todos los vecinos por igual”. El otro gran problema que padecen es el ruido. De hecho, el Mapa Estratégico del Ruido de Madrid de 2021 “recoge que la vecindad de Campamento que vive a pocos metros del Paseo de Extremadura soportan unos niveles de ruido por encima de 70 dB durante toda la franja horaria, superando en muchos momentos los 80 dB”.

Y eso se produce cuando la ordenanza de Protección contra la Contaminación Acústica y Térmica establece los límites de ruido para zonas residenciales en 65 dB para el horario diurno y de 55 dB para el nocturno.

“En determinadas horas pueden estar por encima de los 20 dB” permitidos, puede leerse en el escrito presentado ante la Fiscalía. Esto supone un “grave problema para la salud y el bienestar”, que se manifiesta en forma de “aumento de la sensación de estrés y de fatiga, alteraciones en el sueño, dolor de cabeza y sensaciones de zumbidos o acúfenos, falta de concentración, sensación de vértigo o náuseas”.

Por el ruido procedente del tráfico rodado, “la mayoría de las personas tienen las ventanas cerradas durante todo el año y en los meses de verano deben dormir con las ventanas cerradas porque el ruido hace insoportable el descanso”, ha asegurado la asociación vecinal.

Cambios en el proyecto inicial de soterramiento

El movimiento vecinal lleva “30 años exigiendo soluciones a estos y otros problemas de movilidad y aislamiento que genera la A-5”. “Lamentablemente, el Ayuntamiento no sólo no ha intervenido de forma real y efectiva para atajar esta grave situación, sino que sus mandatarios han incumplido su palabra al excluir la mayor parte de los barrios de Campamento y Aluche del proyecto de soterramiento de la A-5, el llamado Paseo Verde del Suroeste, cuando en sus primeras versiones estaban incluidos”, han reprochado.

El nuevo plan municipal “ya no sitúa la boca del túnel pasada la avenida de los Poblados, como estaba previsto, sino a la altura del número 308 del Paseo de Extremadura, lo que generará aún más polución y ruido en las viviendas de Aluche y Campamento que se encuentran junto a esa vía”.

Ante esto, la vecindad recurre ahora a la Fiscalía. Lo hacen citando sentencias del Tribunal Supremo español y la reciente del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha condenado al Gobierno suizo por su inacción frente al cambio climático.