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Una profesora de Sant Andreu de la Barca alega que debatió en clase sobre el 1-O pero que no humilló a los alumnos

EFE

Martorell (Barcelona) —

Una profesora del instituto El Palau de Sant Andreu de la Barca ha reconocido este viernes ante el juez que organizó un debate en clase sobre el 1-O el día siguiente al referéndum, pero ha negado que humillase a ninguno de sus alumnos ni que hiciese comentarios despectivos a la hija de un guardia civil, como mantiene la Fiscalía.

Según han informado fuentes jurídicas, tres profesoras del centro educativo han declarado esta mañana como investigadas ante el juzgado de instrucción número 7 de Martorell (Barcelona), que instruye la denuncia por incitación al odio que presentó contra ellas la Fiscalía tras el 1-O, y han negado las acusaciones del ministerio público.

En su denuncia, que se dirigía contra nueve docentes aunque de momento sólo son tres las investigadas, el ministerio público mantiene que los profesores del centro dirigieron comentarios discriminatorios y despectivos a hijos de guardias civiles cuando trataban en clase las cargas policiales para impedir el referéndum.

Una de las profesoras ha admitido ante el juez haber organizado un debate sobre el 1-O en clase, para lo que ha dicho que no pidió ningún permiso ni autorización a sus superiores, invocando la libertad de cátedra que la ampara. La docente, sin embargo, ha negado los comentarios que le atribuye en su denuncia la Fiscalía, que afirma que la mujer calificó de “bestias” a los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado por su actuación el 1-O e instó a marcharse de clase a los alumnos que no estuvieran de acuerdo con el debate que organizó sobre el referéndum.

Según el abogado Jorge Piedrafita, de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y que representa como acusación particular a una de las alumnas, “la profesora no se ha mostrado arrepentida de su acción, creía que su conducta era la correcta y ha sentido que estaba amparada por la administración educativa”.

En declaraciones a los medios, el abogado ha considerado que los delitos de los que se acusa a la profesora han quedado probados porque “ha reconocido que hizo un debate sesgado en el que solo se habló de una parte de la historia” y ha señalado que “se tendrá que valorar si se trata de un adoctrinamiento”. Para Piedrafita, la profesora “no fue neutral” porque en el debate no trató “cosas tan importantes como el acatamiento de sentencias judiciales, el respeto a la justicia y los valores constitucionales”.

Sobre los supuestos insultos y menosprecio, el abogado ha explicado que la profesora los ha negado y que en todo caso se entendieron mal, una justificación que la acusación ha considerado contradictoria y una “excusa de mal pagador”.

Las defensas de las tres profesoras imputadas han declinado hacer manifestaciones a la prensa sobre sus declaraciones ante el juez.

La Fiscalía denunció a nueve docentes del IES Sant Andreu de la Barca -un centro frecuentado por hijos de guardias civiles por su proximidad a un cuartel del instituto armado-, aunque se archivaron las causa contra seis de ellos, pendientes de que la Audiencia de Barcelona decida si las reabre a raíz del recurso que presentó el ministerio público.