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“Si hay políticos catalanes que han traído dinero, será porque se habla catalán, está cerca, conocen a la gente...”

Carles Miñana, director de la Unidad de Inteligencia Financiera de Andorra. / Marta Jara

Pedro Águeda

Carles Miñana es la máxima autoridad en control financiero del Principado de Andorra. Antes fiscal, ahora dirige la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), un organismo destinado a prevenir y reprimir el blanqueo de capitales. El fraude fiscal queda fuera de su radar porque las leyes en su país no recogen ese delito.

Miñana niega rotundamente que Andorra se parezca a un paraíso fiscal. Cuando se le pregunta por qué entonces Andorra aparece repetidamente como destino del dinero de políticos catalanes sospechosos de corrupción, apela a la proximidad geográfica, el idioma y a que los bancos les ofrecerán un “yo no sé qué”. Miñana atiende a eldiario.es en Madrid, tras participar en unas jornadas del Instituto de Expertos en Prevención de Blanqueo de Capitales y Financiación del Terrorismo.

En España, el término “inteligencia” está históricamente ligado a los servicios secretos. ¿Qué es exactamente la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de Andorra?

Suena muy ampuloso, ¿no? Luchar contra organizaciones internacionales criminales... Suena todo a un poco de película. La Unidad tiene la facultad legal y los poderes para trabajar con información financiera de las personas en los casos en que, efectivamente, se vislumbre que puede haber una cuestión vinculada al blanqueo de capitales, la financiación del terrorismo, etc. No hay ninguna otra autoridad, ni un juez que pueda recibir esta información.

La UIF se dedica a formación y sensibilización y, por el artículo 53 de nuestra ley, a la supervisión de los sujetos obligados, sean financieros o empresas, y a profesiones financieras no designadas, otro subgrupo de actividad económica importante. Y la hacemos directamente a las entidades financieras: a las de crédito y a las demás.

Acaba de hablar para un auditorio de expertos, pero no se extrañará cuando oye fuera de Andorra que se refieran a ella como un paraíso fiscal.

No es porque lo tenga que decir, sino porque lo creo: Andorra nunca ha sido un paraíso fiscal al uso. Este tema conlleva dos aspectos principales: secreto bancario y opacidad, vinculada a la cooperación internacional. Andorra siempre, y yo he sido 18 años fiscal, siempre ha cooperado judicialmente a nivel internacional. Desde la óptica de la UIF, más todavía, porque pasa por nosotros esa información y la compartimos cuando es el caso.

El tema del secreto bancario es que una entidad se pueda oponer a la autoridad de control, que es la UIF. Y no puede. Por tanto, no hay secreto bancario. Pero es que además toda esta cuestión de opacidad y paraíso fiscal conlleva que no tengas un registro público, que haya sociedades con acción al portador, que no existen en Andorra. La figura del trust está prohibida, el registro en Andorra es público, la persona jurídica está ahí, el objeto social es cierto: pagan un desembolso para constituir, tienen una actividad específica y real, pagan sus impuestos, un 10%. Nada tiene que ver esto con un paraíso fiscal.

¿Por qué entonces las investigaciones por corrupción a políticos catalanes, como Alavedra o Prenafeta, o los mismos Pujol, conducen una y otra vez a Andorra?

Solo una parte acaba en Andorra.

¿Por qué? ¿Qué les ofrece?

No lo sé, yo no soy el señor Prenafeta, ni cualquiera de estos. Quizá este señor, que es catalán, que en Andorra se habla catalán, que lo tengo cerca, que no me tengo que ir a no sé donde, coger aviones y tal, y que ahí se me ofrece 'yo no sé qué'; pues, oiga, lo más normal... Y si conozco el mundillo y gente en Andorra, lo más normal es que me junte con lo que conozco y no busque artificios u otras cuestiones fuera. Que a partir de ahí se escape esta cuestión, pues ya no lo sé.

¿A qué se refiere con ese 'yo no sé qué' que obtienen en Andorra?

No lo sé, yo nunca he sido banquero, siempre he estado al otro lado de la mesa.

Pero los investiga, los monitoriza...

Si efectivamente se detecta que hay alguna irregularidad, nosotros tenemos una función sancionadora. Abrimos un expediente sancionador, que ya se ha hecho, y algunos que están en curso, y ya está.

Hace un par de años, un periodista español entró con cámara oculta en un banco de Andorra, dijo que era un empresario de clubes de alterne y pidió abrir una cuenta. Se le ofreció máxima opacidad y no se le hizo pregunta alguna sobre el origen cierto del dinero ¿Eso es frecuente?

Por suerte, no. Y las cosas están cambiando desde hace algún tiempo, y no un par de años, bastante más. El banquero puso la pata hasta el fondo. Si a su nivel o entidad es así, a mí no me consta que la generalidad del sistema financiero sea esta.

Ustedes no comparten automáticamente la información y no lo harán con España hasta 2018. Los delincuentes económicos y los corruptos contratan caros abogados que recurren a todo tipo de argucias legales para dilatar los procesos. ¿No sería deseable que ese intercambio ágil de información estuviera ya implantado?

Está juntando muchos conceptos. El intercambio de información a demanda ya se comprometió así en este sentido. El automático, da la fecha correcta: a finales de 2018. Y siempre en el sentido que se ha manifestado el Gobierno de Andorra: en igualdad de condiciones para todo el mundo, que todo el mundo cumpla. Si el mundo tiene que ir hacia estos derroteros, todos para allá, que no queden jurisdicciones por el mundo que no cumplan con esta normativa.

El Gobierno español aprobó en 2012 una amnistía fiscal, ¿detectaron ustedes una fuga de capitales?

Eso habría que preguntárselo a la Asociación de Banqueros Andorranos, o a alguno a título particular. De oídas, o lo que yo tengo conocido, que es muy poco, es que no fue excesivo, ni importante. Porque, oiga, Andorra es muy pequeño, que la gente no se piense que en Andorra hay unas ingentes cantidades de dinero y que esto es Hollywood.

No, no... Nosotros no nos asemejamos a otras jurisdicciones que están trabajando con billones y billones. Nuestro sistema financiero se mueve más o menos en 34.000 millones de euros. ¿Es mucho? Sí. ¿Es importante? También. Esto no excluye que tengas que cumplir, y más que los demás. Pero, oiga, vamos a poner las cosas en su sitio. Le voy a contar una anécdota. Una persona significada en España me decía una vez: “Andorra es como aquellos abuelitos que en su época ponían el dinero debajo del colchón, que eran cuatro perras”. Pues ya está.

¿Qué ha supuesto el caso Pujol para Andorra? ¿Ha influido en los recientes acuerdos con España?

Mi parcela es la que es, no sé las reuniones a nivel de Gobierno entre unos y otros. Lo que tengo claro es que el caso Pujol está ahí, hay un histórico muy importante. No se pueden cerrar los ojos a las evidencias. Ahora han llegado las comisiones rogatorias y, a partir de ahí, el competente es el juez al que le haya tocado por turno, y analizará lo que tenga por conveniente y contestará en base a nuestra normativa, que es clarísima y uniforme con la normativa internacional.

Es evidente que el señor Pujol es quien es y hay otras cuestiones, yo qué le voy a decir. Pero a mí me sabe muy mal que, después de todos los esfuerzos a todos los niveles que se están haciendo en Andorra, aparece esto cuando aparece, siendo como era un secreto a voces desde hace muchos años. Ahí hay otros sustratos, a mí no me compete analizarlo.

¿Ha sido requerida la UIF por la jueza de Andorra?

Pues no me acuerdo [silencio].

¿Han crecido las peticiones de información desde otros países en los últimos años?

Sí, y se han expandido a nivel internacional. Las memorias de actividades de cada año se pueden ver en nuestra página web. No significa más que, cuando llega una petición internacional, se abre un expediente, y este tiene una referencia. No quiere decir que se concluya ahí. Ese número puede comportar 25 peticiones o transmisiones de comunicación entre uno y otros, pero no le damos 25 números, le damos uno. Es evidente que por una cuestión de vecindad tenemos más peticiones de España que de Kathmandú.

Está demostrado que esta crisis ha empobrecido a muchos y ha enriquecido aún más a unos pocos. ¿Ha tenido eso reflejo en los flujos de España a Andorra?

La verdad es que no lo sé.

¿Podría decirme si la señora Mercè Pigem visitó alguna entidad bancaria andorrana el 15 de noviembre –fecha de su interceptación en la frontera con algo menos de 10.000 euros en metálico– o en días anteriores?

¿Mercè Pigem?

La exdiputada de CiU y en aquel momento vocal del Consejo General del Poder Judicial.

No la conozco y no está dentro de mis funciones ir siguiendo a la gente por la calle.

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