Margallo admite que el acuerdo de la UE con Turquía sobre refugiados es una “chapuza”

El acuerdo que la UE cerró con Turquía para intentar frenar el flujo de refugiados e inmigrantes, y que tantas dudas generó sobre su legalidad, es una “chapuza”, ha reconocido este miércoles el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación en funciones, José Manuel García-Margallo.

En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press, el ministro ha explicado que el acuerdo persigue que Turquía “ayude” a la UE a que los refugiados e inmigrantes no lleguen a la Unión “masivamente por mar”. “Está bien porque es que antes se jugaban la vida. Las mafias estaban manejando 3.000 millones de euros anuales aprovechándose de la desgracia de esta gente y estábamos asistiendo a muertes y naufragios en el Egeo intolerable”, ha indicado.

Gracias a este pacto con Ankara, la UE ha comenzado a deportar a migrantes y refugiados hacia suelo turco. A pesar de que las autoridades europeas sostienen que estas personas no querían pedir asilo, Acnur afirmó que en la primera expulsión hubo al menos 13 personas que dicen que no pudieron solicitar protección. Además, Human Rights Watch ha denunciado que algunas de estas personas fueron engañadas para ser deportadas.

Aunque Turquía está cumpliendo su parte del acuerdo y está ayudando a frenar el flujo de inmigrantes hacia la UE, ha dicho García-Margallo, el ministro ha insistido en que el acuerdo “no deja de ser una chapuza”, además de que deja la solución “en manos de un país tercero que, a cambio, ha pedido unas determinadas condiciones”.

García-Margallo ha explicado que la reubicación de refugiados por el territorio de la UE, debido a se ha formado un “cuello de botella” en los países europeos a los que llegan los inmigrantes (Grecia e Italia, fundamentalmente), está motivado porque la legislación europea estipula que quien llega a la UE en busca de asilo político tiene que ser “identificado, registrado y reubicado” y en una primera fase se tiene que hacer cargo de él el primer país al que llegó.

Sin embargo, Grecia está desbordada por la cantidad de refugiados y migrantes que han entrado en sus fronteras y no tiene funcionarios suficientes para realizar con agilidad esos trámites.

A juicio del ministro, este problema solo se podrá solucionar cuando se cree “una agencia de asilo europea auténticamente común que se haga cargo de estas personas y que inmediatamente las vaya redistribuyendo entre los países que tengan capacidad”.

El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha rechazado en Bruselas la propuesta de la Comisión Europea de un sistema permanente de reparto de refugiados. En su opinión, este sistema “disuadiría” a España a controlar sus fronteras.

García-Margallo ha reiterado que el esfuerzo que la UE está haciendo en esta crisis de refugiados es “muy menor” y manifiestamente “mejorable”, además de que está lejos de las cifras de personas que países como Líbano y Jordania han acogido.