El PP sale en defensa de los profesores interinos, tras dejar de contratar a miles en 2012

La diputada del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Claudia Alonso, denunció este fin de semana que el próximo 24 de junio “miles de profesores interinos” de toda la región serán denunciados “antes de que termine el curso” y también sin poder acabar sus evoluciones. La portavoz de Educación en el Parlamento regional aseguró que esto provocará “un nuevo caos educativo” en Castilla-La Mancha, al afirmar que los trabajadores no podrán siquiera cerrar las actas de los cursos. Alonso señaló que tampoco se podrán finalizar las evaluaciones, por lo que el cierre de curso será “el más caótico” desde que la Junta asumió las competencias.

En 2012, las distintas medidas de recorte que asumió el Gobierno de María Dolores de Cospedal hizo que el curso escolar iniciase entonces con casi 4.000 profesores interinos menos que en 2011. Se trataba, según informaba el País, de dos tercios menos de profesionales, a lo que se sumaba el cierre de más de 60 escuelas rurales a lo largo de la región. Los interinos trabajaban en los ciclos de infantil, primaria y secundaria y redujeron el número de profesores hasta los 30.000 en toda la región.

Marcial Martín aseguró entonces que, efectivamente, había menos profesores que en 2011, pero que serían los “necesarios”. Además, La Junta quiso también puntualizar que no se despedía a los interinos, sino que los interinos se contrataban en función de las necesidades del servicio. Comisiones Obreras denunció en 2013 que el curso escolar volvía a iniciarse con un “importante déficit de docentes” y que, además, la incorporación de los profesores interinos se producía sólo un día antes que los alumnos

Sin embargo, el PP insiste en que la situación en 2016 no es otra cosa que un “incumplimiento más de Page”, a quien ha acusado de señalar que “quería” que los interinos trabajasen durante los meses de julio y agosto. Alonso ha afirmado también que el Gobierno regional demuestra “nulo interés” en facilitar el trabajo de los centros docentes.  Finalmente, el partido ha señalado que se trata de un “nuevo ejemplo” de la improvisación y el caos, la “seña de identidad” de las políticas educativas de la Administración. 

La diputada regional ha apuntado también a la reválida de sexto de primaria como una nueva “prueba” del caos, señalando que sus instrucciones se publicaron de manera precipitada y sin contar con la información necesarias. “Nuevamente se demuestra la improvisación más absoluta así como la falta de gestión en las políticas educativas de Page”, aseguró Alonso, quien calificó la prueba como una “importante” para que la administración educativa conozca de manera “objetiva y real” la situación por la que pasa.