Muchas han sido las informaciones que se han publicado sobre la investigación de los atentados en Barcelona y Cambrils del pasado 17 de agosto. Sobre los preparativos de una masacre mayor desde la casa de Alcanar, sobre las indagaciones policiales entre los escombros de la que era su base logística o sobre el posible conocimiento de la radicalización del imán Abdelbaki Es Satty.
Este lunes el major de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, desmentía en una entrevista en Catalunya Ràdio varias de esas informaciones. Trapero se mostraba rotundo y contundente tras denunciar la publicación de noticias que considera falsas sobre la actuación de los Mossos. Ha afirmado que los titulares no afectan al cuerpo policial, pero sí ha reconocido que le preocupa que los medios “engañen a la ciudadanía”, aunque eso, a su juicio suceda cada vez menos.
“Tres o cuatro diarios van inoculando la idea de que esto se podría haber evitado. Hay quien pone flores y hay quien echa mierda”, ha zanjado.
El mayor de los Mossos ha lamentado el interés que puede haber tras la publicación de determinadas informaciones y ha defendido que la policía catalana ha sido “muy proactiva y transparente” a la hora de informar, si bien ha reconocido que aún “no es el momento” de ofrecer detalles sobre algunos aspectos de la investigación.
Estas son algunas de las informaciones que el responsable de los Mossos ha negado.
1. La Sagrada Familia no es un objetivo confirmado
Trapero ha señalado que los Mossos no tienen datos que apunten a que la célula yihadista tenía previsto actuar contra la Sagrada Família. “Ni nosotros ni nadie lo tiene confirmado”, ha asegurado. Lo que sí ha detallado es algo de lo que ya informó la policía: que los terroristas querían hacer un atentado de mayor envergadura, por la cantidad de bombonas de butano que acumulaban y por la elaboración de explosivos. Sin embargo, ha insistido en que se desconocen los objetivos.
2. Niega un aviso de la jueza sobre los preparativos en Alcanar
El mayor de los Mossos ha negado también que la titular del juzgado de instrucción número 2 de Amposta, que participó en la inspección de los escombros de la casa de Alcanar, alertara a los agentes de que allí se podía estar preparando un atentado, tal como informó ABC el pasado jueves.
“Es cierto que la jueza de Amposta nos preguntó: '¿Con una bombona de butano se puede hacer una bomba'?”, ha admitido Trapero como única referencia a esos hechos, aunque ha añadido que la magistrada no habló en ningún momento de un posible atentado, como afirmaba ABC con citas textuales. “Si hubiera pensado que la explosión de Alcanar estaba relacionada con el terrorismo, hubiera abierto una investigación”, ha afirmado, recordando que esa decisión depende precisamente de los jueces.
Trapero ha señalado que los Mossos hallaron en un primer momento 20 bombonas y otros elementos que hicieron pensar a los agentes y el resto de implicados en la investigación que la vivienda podía tratarse de un laboratorio de drogas. Solo tras la segunda explosión se descartó esa posibilidad.
3. El ofrecimiento de los Tedax de la Guardia Civil
Sobre el supuesto ofrecimiento de los Tedax de la Guardia Civil para inspeccionar los escombros del chalet de Alcanar, Trapero lo ha negado tajantemente. “No nos lo ofrecieron, en ningún caso”, ha dicho. Ha indicado que esa oferta no tendría sentido ante los recursos y competencias de cada cuerpo policial: “No se hizo ofrecimiento, porque no hubiese tenido ningún sentido. Los Mossos ya tienen su equipo de Tedax”.
La Asociación Unificada de la Guardia Civil y el Sindicato Unificado de Policía denunciaron en un comunicado que los Mossos impidieron a los Tedax acceder a la casa de Alcanar tras la explosión.
4. La alerta de la policía belga que resultó ser una petición por cauces informales
“Esto ha sido otro titular de periódico falso”, ha señalado Trapero, que en la entrevista ha recordado de nuevo cómo se produjo la comunicación entre un sargento de los Mossos y un agente de policía local de la población belga de Vilvoorde que le solicitaba información sobre el imán Es Satty.
“Otra mentira más y una irresponsabilidad más”, ha zanjado. Trapero ha recordado que no hubo ninguna alerta sino una demanda de información por email por parte de un policía local belga. “Le pregunta a un mosso si tiene información sobre esta persona”, ha señalado Trapero, que ha recordado que la petición se enmarcaba en las dudas de una mezquita ante la posibilidad de contratar a Es Satty, que no presentaba su certificado de antecedentes penales. Trapero ha lamentado que esa solicitud de información se convirtiera en algunos medios en “una alerta”.
Según el mayor, si hoy se produjera esta solicitud, la respuesta de los Mossos habría sido la misma.
5. El supuesto aviso de la CIA meses antes
Una información de El Periódico de Catalunya publicada escasas horas después del atentado indicaba que la CIA había avisado a la policía catalana sobre el hecho de que La Rambla podía ser un objetivo. También lo ha negado Trapero: “Las relaciones con los servicios secretos no son competencia de los Mossos”, ha recordado.
Este jueves, El Periódico ha publicado el contenido de ese supuesto aviso de la CIA. Trapero y el conseller Forn han reconocido la existencia de un aviso en mayo, han reitero que su origen no fue la Agencia Central de Inteligencia de EEUU y han aclarado que el Estado y los Mossos lo consideraron de escasa credibilidad y que las investigaciones posteriores lo desvinculan del atentado.
6. La posible ayuda que recibió Abouyaaqoub
En las horas posteriores a la captura del terrorista fugitivo, Younes Abouyaaqoub, se especuló con la posibilidad de que hubiera podido contar con ayuda en su huida, lo que implicaría que había más personas en la célula. “No tenemos ningún elemento que nos haga pensar que obtuvo ayuda, sino todo el contrario”, ha asegurado el mayor de los Mossos.
Tras el atentado, Abouyaaqoub “estuvo vagando hasta el lunes”, según Trapero, que sí ha detallado que uno de los contactos que tuvo Younes Abouyaaqoub fue con una mujer a quien intentó robarle el coche.